El presidente del Senado, Reinaldo Pared Pérez, advirtió que no recibirá en su despacho al secretario de Estado de Medio Ambiente, Max Puig, al reprocharle que antes de apelar a las vías institucionales a su alcance se prestó a iniciar un debate público innecesario en torno a sus acusaciones contra legisladores por la Ley de Áreas Protegidas.
Pared Pérez dijo: “No me voy a prestar a conciliábulos” y emplazó a Puig a que sea responsable en su denuncia.
“Él ha hecho una denuncia de manera genérica”, reprochó Pared Pérez, al tiempo de advertir que el funcionario de Medio Ambiente podría ser interpelado por la Cámara Alta.
“No es descartable esa posibilidad de interpelar a ese funcionario”, aseguró el presidente del Senado, ante una pregunta de la prensa.
Agregó que es cuestionable el ejercicio de Puig como titular de la Secretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente.
Al insistir en su cuestionamiento a Puig, Pared Pérez recordó que el papel de este funcionario en relación al llamado rockash ha sido sumamente pobre e indiferente.
Sobre la alegada complicidad de senadores y diputados, que estarían detrás de los intentos de modificación de la ley, a fin de favorecer a particulares en el Parque del Este, reclamó a Puig que identifique públicamente a aquellos legisladores que están detrás de esta maniobra y no se lo diga en privado a él.
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