La Dirección Nacional de Control de Drogas relevó sus mandos en Santiago, San Francisco de Macoris y Bani, en medio de situaciones escandalosas relacionadas al tráfico de estupefacientes.
Aunque elcambio a sus oficiales y agentes no obedecen a nada en especial de acuerdo al mayor General Gilberto Delgado Valdez, se producen luego de las denuncias del senador Winston Guerrero que involucró a esa entidad en el triunvirato de la distribución de estupefacientes en Peravia.
En Santiago este cambio se produce antes que el actual designado cumpliera tres meses cuando fue sustituida la capitana Raysa de la Cruz, trasladada a Santo Domingo.
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